La boxeadora Esmeralda Falcón aspira a ser la referente de su deporte
25/03/2018
Esmeralda Falcón, ganadora de la única medalla de oro del equipo mexicano en el Torneo Clasificatorio para los XXIII Juegos Centroamericanos y del Caribe Barranquilla 2018, celebrado en Tijuana, Baja California la semana anterior, manifestó que espera que este triunfo abra muchas puertas para su carrera deportiva y también a las demás boxeadoras que como ella, intentan destacar en el difícil deporte del boxeo.
México asistió al torneo clasificatorio con 15 boxeadores, diez hombres y cinco mujeres, de los cuales ocho varones consiguieron medallas y pase a la justa deportiva regional, y tres mujeres, entre ellas Esmeralda Falcón, en la división de los 60 kilogramos.
Falcón, originaria de Xochimilco, es una joven que se perfila para ser un icono en su disciplina, al igual que lo han hecho otras mujeres como el caso de Soraya Jiménez (levantamiento de pesas), María del Rosario Espinoza (taekwondo), Paola Espinosa (clavados), Ana Gabriela Guevara (Atletismo), Aída Román (tiro con arco), entre otras, pero además, una destacada alumna de Actuaría, pero que debido a la falta de oportunidades para conjuntar el deporte y el estudio, tuvo que dejar la escuela.
México asistió al torneo clasificatorio con 15 boxeadores, diez hombres y cinco mujeres, de los cuales ocho varones consiguieron medallas y pase a la justa deportiva regional, y tres mujeres, entre ellas Esmeralda Zamudio, en la división de los 60 kilogramos.
Falcón, originaria de Xochimilco, es una joven que se perfila para ser un icono en su disciplina, al igual que otras mujeres como el caso de Soraya Jiménez (levantamiento de pesas), María del Rosario Espinoza (taekwondo), Paola Espinosa (clavados), Ana Guevara (atletismo), Aída Román (tiro con arco), entre otras, pero además, una destacada alumna de Actuaría, pero que debido a la falta de oportunidades para conjuntar el deporte y el estudio, tuvo que dejar la escuela.
Recuerda que ante ese obstáculo y desilusión, acompañada con la reflexión de una profesora que le dijo “tu cuerpo caduca, tu mente no, la escuela te va a esperar, tu cuerpo no”, fue como tomó la decisión de cambiarse de carrera, después de realizar un diplomado en matemáticas, se inscribió a la Escuela Superior de Educación Física y es ahí donde actualmente estudia la Licenciatura en Educación Física en la especialidad de Docencia Física.
“El deporte es muy bonito, pero temporal, incierto. Al deporte debemos verlos como una distracción y no una obligación, porque esto último limita tus aspiraciones”.
Esta medalla de oro para Esmeralda tiene nombre y apellidos; el primero es mi país México, el apoyo de mi familia, la guía acertada de mis entrenadores Fabián Martínez, Francisco Bonilla, Octavio Robles, así como el invaluable apoyo y respeto que siempre he recibido de mis compañeros hombres y mujeres boxeadores, que diariamente me ayudan a ser mejor. “No puedo dejar a un lado a todos aquellos que me han brindado la oportunidad de desarrollar mi deporte y confiado en mí”, citó Esmeralda.
También, la medalla de oro significa un reflejo de que el trabajo se está haciendo bien, como también, un compromiso de prepararse mejor “porque seguramente las rivales que tuve en el clasificatorio van a querer mi cabeza, y buscarán todos mis errores para derrotarme. La corona solo se te da una vez y de ti depende si la cedes o la mantienes, yo la quiero mantener.
De lo que más me acuerdo al término de cualquier combate son los golpes que recibí, porque son los que dejan al descubierto mis errores y debilidades, mismos que me hacen trabajar más duro en el gimnasio para corregirlos. Mi estilo es ser estilista, sin embargo, tengo la fuerza para ser fajadora también”, mencionó.
En el boxeo como en otros deportes y ocupaciones, con disciplina y trabajo no hay nada que no se pueda alcanzar y para Barranquilla, Esmeralda tiene bien fija la mirada en estar en el podio.
“No quiero dar color de la medalla, pero estoy segura de que estaré en el podio, el camino es paso a paso. Posteriormente vendrán los Juegos Panamericanos, Campeonatos Mundiales y Juegos Olímpicos. Los tiempos de Dios son perfectos. Hoy estoy más madura, centrada y preparada deportivamente para hacer frente a los próximos retos que vienen y de la mejor manera.
Nada ni nadie te pueden quitar las ganas de crecer, triunfar o realizar tus sueños, de ti depende de que ese sueño se convierta en una meta y de esa meta en un hecho. Como mujer entrego todo a un compromiso, finalizó.