Lista la villa de los atletas más grande de la historia olímpica
03/06/2016
En el edificio 29 y de los pisos 13 al 17 es donde estará hosepdada la Selección de México que participará en Río 2016, en una Villa (ya está terminada) que pasará a la historia como la más grande de unos Juegos Olímpicos.
Mario Cilenti, conocido como el "alcalde", es un veterano de seis Juegos Olímpicos y Panamericanos, experimentado directivo quien será el encargado de administrar la Villa Olímpica de Rio 2016.
Durante los Juegos Olímpicos en agosto, este enorme complejo al lado del Parque Olímpico de Barra, será el hogar temporal de miles de jóvenes atletas provenientes de todo el mundo que llegarán a la ciudad para vivir su propio sueño Olímpico.
El trabajo de Cilenti y su ejército de empleados y voluntarios es asegurarse de que la villa atlética más grande de la historia sea un lugar confortable, amigable e inspirador para todos los competidores.
El complejo cuenta con 31 edificios nuevos de 17 pisos cada uno, con 3.604 departamentos, que se despliegan en 1.5km de largo.
Así como a más de 10.000 atletas, la Villa Olímpica albergará a funcionarios de las delegaciones nacionales, incluyendo entrenadores, médicos y psicólogos. En el momento de mayor efervescencia de los Juegos, unas 18 mil personas permanecerán en el complejo, a los que se sumarán alrededor de 13.000 empleados y voluntarios.
En las áreas comunes habrá kioscos que venderán jugos de fruta, cocos, açaí y otros refrigerios. "Estamos haciendo todo lo posible para que los atletas no tengan que dejar la villa", dijo Cilenti. "Pueden salir para competir y volver directo", agregó.
El complejo incluye una gran área de recreación con videojuegos, instrumentos musicales, mesas de billar y tenis de mesa, un gimnasio de última generación, un salón de belleza y a cada atleta se le obsequiará un teléfono inteligente gratis.
Para gestionar la logística de una operación de tamaño olímpico, Cilenti estará a cargo de 600 personas durante los Juegos. Entre las responsabilidades está la de asegurarse que una flota de 300 autobuses opere puntualmente y que el comedor que funcionará todo el día, esté en condiciones de atender a un estimado de 5.000 personas.
Habrá restricciones respecto de los ruidos en la villa. Cilenti dijo que el principal problema tiende a surgir durante la segunda semana, cuando algunos atletas han terminado de competir, mientras que otros aún tienen que disputar sus eventos. "Tratamos de hablar con los jefes de las delegaciones para evitar esto", expresó.
"Todo el que entre en la villa necesitará atravesar por escáneres de rayos X", resaltó Cilenti. "Hasta las maletas de los atletas serán chequeadas", agregó.
El 18 de julio, los primeros funcionarios de las delegaciones nacionales comenzarán a registrarse. El 24 de julio, los primeros atletas llegarán a su nuevo hogar.
(Fotos: Brasil2016.gov.br/André Motta)