18/03/2015
Gustavo Huet Bobadilla, se convirtió en el primer mexicano en subir al podio de los triunfadores, tras ganar una medalla en nuestra historia de juegos olímpicos y es, hasta la fecha, el único tirador nacional que ha logrado una presea en la fiesta deportiva mas grande e importante del mundo Gustavo Huet, logró la medalla de plata en los Juegos Olímpicos de Los Angeles en 1932.
El se adelantó a subir en el podio de honor, al boxeador Francisco Cabañas, quien ya tenia asegurada una medalla, pero Huet Bobadilla, fue el primero en ver ondear nuestro lábaro patrio y darle a México este gran honor, inclusive escuchar nuestro Himno Nacional, ya que este suceso tiene una serie de anécdotas que le permitieron convertirse en galardonado olímpico y que hoy en día su nombre aparece en una placa alusiva del Comité Olímpico Mexicano y en el Salón de la Fama del deporte mexicano.
La historia cuenta que Huet, escucho el himno nacional, porque oficialmente él y su adversario el sueco Bertil Ronnmark habían terminado empatados, logrando ambos la medalla de oro, puesto que el reglamento de la época no previa un empate. Empero se procedió a una ronda mas de desempate, ahí, el sueco lo venció por un tiro en la especialidad de fusil; por ello, el gran honor de haberse escuchado por vez primera en juegos olímpicos los acordes del himno nacional mexicano.
Gustavo, quien curiosamente para disparar siempre tenia los dos ojos abiertos, por desgracia los cerró para siempre, en un infortunado accidente un 20 de noviembre de 1951, a la edad de 40 años ya que se desempeñaba como comandante de la policia de caminos, y al cumplir una misión fue atropellado por un auto cuyo conductor estaba en completo estado de ebriedad.