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17/09/2015
Las afecciones del hombro, como los dolores y molestias, son muy comunes. La mayor parte de se producen con el uso y abuso diario, algunas por accidente y otras por envejecimiento natural. Tu hombro se mueve cada vez que mueves el brazo.
La articulación del hombro es una bola que embona en una cavidad cóncava y tiene tres huesos principales: el húmero, la clavícula y la escápula. Estos huesos son mantenidos en su lugar por músculos, ligamentos y tendones.
La articulación del hombro es la que tiene más rango de movimiento de todo el cuerpo, debido a su gran movilidad. También puede ser muy inestable y esto lo hace susceptible a las lesiones.
Las lesiones de hombro pueden ser leves o severas. Los síntomas más frecuentes son: dolor, adormecimiento, inflamación, hormigueo, debilidad, cambio de coloración o temperatura. Las lesiones se hacen más comúnmente en actividades deportivas o de trabajo físico, pero también en ocupaciones caseras, caídas y hasta en reposo.
Muchas de las molestias que provocan las anteriores actividades pueden ser atendidas en casa con terapia sencilla. Una lesión muy común es la que se conoce como la del manguito rotador, un daño a alguno de los músculos que rodean al hombro.
Dichos daños a estas estructuras pueden ser de diferente tipo desde simple inflamación hasta desgarro o completa ruptura. Los músculos que forman al manguito rotador son cuatro y su principal función es mantener la articulación alineada mientras levantas y giras tu brazo.
La forma más común de lastimarte el hombre es debido a un accidente; a esto se le llama lesión aguda, puede ser provocada por una caída sobre el hombro o el brazo extendido; también debido a un golpe directo sobre de él, o por un movimiento de giro o doblez.
La inflamación y moretones pueden aparecer corto tiempo después del evento, si algún nervio o vaso sanguíneo fue lastimado puedes sentir frío, adormecimiento, hormigueo y/o cambio de color. La intensidad del dolor dependerá del grado de lesión.
La forma en la que se diagnostica una lesión de hombro por un especialista es realizando una historia clínica en la que se te preguntará como te lo lastimaste o lo que también se llama “mecanismo de lesión”; este tipo de daño es muy importante, ya que nos puede decir que músculo o qué área fue más probablemente lesionada.
Se te realizará una inspección física en la que muy probablemente se harán pruebas ortopédicas que se enfocarán en encontrar el músculo, ligamiento o tendón lesionados. También muy probablemente se te tomará una radiografía para apreciar si existe algún daño en la estructura ósea.
Si el especialista lo cree necesario, te puede mandar una resonancia magnética o un ultrasonido para apreciar de manera más exacta el posible daño en el tejido blando (músculo, ligamiento, cápsula) y su exacta localización.
La mayor parte de las lesiones de hombro son tratadas sin la necesidad de recurrir a la cirugía. Los daños ligeros, que son atendidos de manera temprana, usualmente sanan en unos días con tratamientos caseros como la aplicación de compresas con hielo y reposo.
En lesiones más avanzadas es necesario utilizar la experiencia del especialista para llegar a un diagnóstico detallado y escoger el tratamiento adecuado para una pronta y correcta rehabilitación.
Recomendaciones para evitar y prevenir este tipo de lesiones:
Por Dr. Bernardo Sañudo
Experto Asdeporte en Quiropráctica