Trauma nasal

10/09/2019

Trauma nasal se define como cualquier lesión traumática en la nariz y sus estructuras adyacentes. El mecanismo de lesión más frecuente es por contusión directa. La nariz es la parte más prominente de la cara y la más susceptible a lesiones. El hueso nasal es el hueso más comúnmente fracturado en la cara y el tercero en el cuerpo humano.

Los deportistas se encuentran en mayor riesgo de sufrir un evento traumático. En una encuesta realizada recientemente, aproximadamente dos de cada tres traumas nasales derivaron en fractura nasal, y la mitad de ellos se debió a actividades relacionadas con el deporte. De forma interesante, se reportó que el 87% de estas fracturas se debió a deportes clasificados como “deportes de no contacto”, con mayor incidencia en deportes como fútbol, básquetbol, béisbol y sóftbol. Otro factor para tener en cuenta es la edad, donde se reportó una mayor incidencia en el grupo de edad de 16-20 años.

El trauma nasal es una emergencia médica y debe ser atendida lo antes posible por un profesional de la salud capacitado. Los síntomas más comunes suelen ser: intenso dolor centro facial, epistaxis (sangrado por la nariz), deformidad nasal y obstrucción nasal que puede resultar en dificultad respiratoria.

La evaluación inicial consiste en asegurar la ausencia de compromiso cardiorrespiratorio y la realización de un interrogatorio dirigido, el cual consiste en obtener datos sobre el mecanismo de lesión y posibles antecedentes médicos de importancia.

Las primeras horas posteriores a la lesión son de vital importancia en el manejo y pronóstico del paciente. El examen físico consiste en la visualización directa y palpación de la nariz en busca de laceraciones, hematomas, crepitaciones o deformidad. Es necesario realizar una examinación nasal interna para evaluar la integridad y posición del septum o tabique nasal, descartando hematomas septales o desviaciones que puedan condicionar obstrucción nasal.

El manejo inicial o en agudo consiste en la reparación de laceraciones, control de epistaxis y drenaje de hematomas septales. El tratamiento definitivo consiste en la reevaluación del paciente en los 3 a 5 días posteriores al evento traumático, con el fin de una mejor visualización de las estructuras anatómicas al resolverse el edema inicial (inflamación).

De acuerdo con el tipo de lesión y evolución, el médico debe solicitar la realización de un estudio auxiliar en el diagnóstico, preferentemente una tomografía de nariz. En el caso de fractura nasal simple, el manejo definitivo puede consistir en la reducción cerrada de la fractura. Sin embargo, se ha reportado que hasta la mitad de los pacientes sometidos a dicho procedimiento requerirán en el futuro un procedimiento quirúrgico, conocido como Rinoplastia Funcional. En el caso de fracturas complejas, acompañadas de desviaciones y/o hematomas septales, se recomienda de inicio la realización del procedimiento quirúrgico conocido como Rinoseptoplastia Funcional.

La meta en el tratamiento del trauma nasal es la conservación de la estética facial, permeabilidad nasal bilateral y prevención de estenosis o perforaciones septales. Las principales complicaciones a corto y mediano plazo debido al mal manejo de un trauma nasal consisten en: deformidad nasal, obstrucción y dificultad respiratoria, epistaxis de repetición, absceso y/o perforación septal, trombosis del seno cavernoso, fuga de líquido cefalorraquídeo, obstrucción del conducto naso lacrimal y sinusitis.

En cualquier caso, siempre es preferible ser valorado por un médico especialista. Cualquier duda o consulta, estoy disponible en todo momento, no dudes en contactarme.

Dra. Vianney García Román

Otorrinolaringología y Cirugía de Cabeza y Cuello

Estética facial

FB: Dra Vianney García Román

Instagram: dra.vianney